Procedimiento:
Lavar y secar bien los calabacines. Sacar los tallarines usando un pelador con dientes, o simplemente los cortamos a lo largo con la parte más dura del calabacín. El centro del calabacín lo reservamos para usarlo para una crema o sopa.
Disponer en un colador, echar una buena pizca de sal y remover. Dejar que escurra un poco el agua durante unos 15 minutos. Mientras, preparar la salsa batiendo en un cuenco todos los ingredientes. Probar y ajustar las cantidades al gusto.
Laminar muy finos los ajos y dorarlos en una sartén con un poco de aceite de oliva, vigilando que no se quemen. Si usamos sésamo crudo, tostarlo también (1-2 cucharaditas). Escurrir bien el calabacín, pero con suavidad, y echar a la sartén.
Salpimentar y dar unas vueltas ligeras. Añadir una parte de la salsa vinagreta y saltear a fuego vivo durante unos 2-3 minuto, o un poco más si se prefiere una textura más tierna. Servir con el resto de la salsa, queso recién rallado y más sésamo.
Informe21
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario