sábado, 31 de octubre de 2015

Berenjenas a la parmesana


Ingredientes (4 comensales):
2 berenjenas medianas, 6 tomates maduros pero firmes, 2 bolas de mozzarella de búfala, 100 gramos de queso parmesano, pimienta negra, albahaca fresca, orégano (opcional), sal, aceite de oliva virgen extra.

Elaboración:
Lava las berenjenas, despúntalas y córtalas en rodajas de medio centímetro de grosor. Puedes hacer las rodajas transversales o longitudinales, según el molde que vayas a utilizar, pues puedes preparar las berenjenas a la parmesana en moldes individuales o hacerla en una fuente amplia para después repartir.
La receta original de Melanzane alla parmigiana pide rebozar y freír la berenjena, pero aligeramos bastante más el plato haciéndola al horno o a la plancha. Si quieres hacerla al horno, después de cortar las rodajas de berenjena sálalas y disponlas en la bandeja del horno con unas gotas de aceite de oliva. Hornea a 180º C hasta que estén tiernas y ligeramente doradas.
Mientras se hacen las berenjenas puedes preparar los tomates. Lávalos, pélalos si quieres y trocéalos en daditos. Rehoga el tomate en una sartén con un poco de aceite de oliva, cinco o seis hojas de albahaca fresca, sal al gusto y una pizca de azúcar. Sofríe a fuego fuerte no más de diez minutos.
Ralla el parmesano y corta en finas lonchas la mozzarella y empieza a montar el plato, que viene a ser como una lasaña. Se empieza con una base de tomate, pero nosotros la obviamos porque como os hemos comentado, nos gusta con poco tomate. A continuación (o en principio) dispón una cama de rodajas de berenjena solapando unas con otras, espolvorea el parmesano recién rallado, cubre con unas lonchas de mozzarella y seguidamente una capa de tomate, vuelta a empezar con las berenjenas, el parmesano, la mozzarella y el tomate.
Entre capa y capa puedes poner también unas hojas de albahaca, y para culminar el plato termina con las rodajas de berenjena cubiertas de tomate y sobre este un poco de parmesano y mozzarella para gratinar.
Introduce en el horno precalentado a 180º C con el grill encendido durante media hora aproximadamente, cuando la superficie se haya dorado, puedes retirar la Melanzane alla parmigiana y servir espolvoreando un poco de orégano y decorando con unas hojas de albahaca fresca.

miércoles, 28 de octubre de 2015

La ciencia nos da la razón: OMS advierte que embutidos y fiambres son cancerígenos

La carne procesada es cancerígena para los humanos, mientras que la carne roja "probablemente" también lo es, según un estudio difundido hoy por la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (IARC, por sus siglas en inglés).
Un grupo de trabajo de 22 expertos de 10 países convocados por el Programa de Monografías de la IARC -agencia que depende de la Organización Mundial de la Salud (OMS)- consideró que hay "evidencia suficiente" de que el consumo de carne procesada causa cáncer colorrectal.
Mientras, clasificó el consumo de carne roja como "probablemente carcinógeno" para los humanos, basado en "evidencia limitada" de que este tipo de alimento puede causar cáncer colorrectal, pero también de páncreas y de próstata.
Según la agencia, existe una "fuerte evidencia mecanicista" que sostiene un efecto carcinógeno de la carne roja.
Los expertos concluyeron que cada porción de 50 gramos de carne procesada consumida diariamente aumenta el riesgo de cáncer colorrectal en un 18 %, en un comunicado difundido por la IARC (con sede en la ciudad francesa de Lyon).
"Para un individuo, el riesgo de desarrollar cáncer colorrectal por su consumo de carne procesada sigue siendo pequeño, pero este riesgo aumenta con la cantidad de carne consumida", dijo, según la nota, el doctor Kurt Straif, jefe del Programa de Monografías de la IARC.
Y añadió que "en vista del gran número de personas que consumen carne procesada, el impacto global sobre la incidencia del cáncer es de importancia para la salud pública".
El grupo de trabajo de la IARC consideró más de 800 estudios que investigaron asociaciones para más de una docena de tipos de cáncer con el consumo de carne roja y de carne procesada en muchos países y poblaciones con dietas diversas.
Para el director de la IARC, Christopher Wild, "estos hallazgos apoyan aún más las actuales recomendaciones de salud pública acerca de limitar el consumo de carne".
Pese a ello, recordó el "valor nutricional" de la carne roja, por lo que estimó que las conclusiones del estudio servirán a gobiernos y agencias reguladoras para emitir sus propias recomendaciones dietéticas.
La IARC especifica en el comunicado que con carne roja se refiere a "todos los tipos de carne muscular de mamíferos, tales como la carne de res, ternera, cerdo, cordero, caballo o cabra".
Por su parte, la carne procesada hace alusión a "la que se ha transformado a través de la salazón, el curado, la fermentación, el ahumado u otros procesos para mejorar su sabor o su conservación".
La mayoría de este tipo de alimentos contiene carne de cerdo o de res, pero también pueden contener otras carnes rojas, aves o subproductos cárnicos como la sangre, y algunos ejemplos son las salchichas, el jamón, la carne en conserva, la cecina, la carne en lata, o las preparaciones y salsas a base de carne.
La IARC señala que un resumen de las evaluaciones finales está disponible online en la publicación especializada "The Lancet Oncology". EFE

jueves, 22 de octubre de 2015

Paté de lentejas rojas


Ingredientes para el paté de lentejas rojas:
100 g. de lentejas rojas.
1 berenjena.
2 dientes de ajo.
100 g. de setas
1 ramita de menta fresca.
El zumo de medio limón.
Aceite de oliva.
Sal y pimienta.

Elaboración:
Hervir las lentejas rojas hasta que estén tiernas, colarlas y dejar que enfríen.
Mientras, asar la berenjena en el horno untada en aceite. Cuando la notemos blanda, sacarla del horno, envolverla en papel, pelarla cuando se haya enfriado y picarla finamente.
Saltear las setas, limpias y picadas, con los ajos machacados y dos cucharadas de aceite.
Mezclar las lentejas, la pulpa de la berenjena y las setas, y triturar hasta formar una pasta homogénea. Aliñar con la menta, el zumo de limón, sal, pimienta y un poco de aceite.
(de Enbuenasmanos.com)

El ayuno contribuye a la regeneración celular

Un estudio, publicado en la revista "Cell Stem Cell”, señala que también ayuda para fortalecer el sistema inmune
El ayuno periódico por dos o tres días contribuye a la regeneración de células madre en la sangre y la restauración del sistema de inmunidad, contrarrestando los efectos de la quimioterapia y el envejecimiento. Así lo afirma una investigación publicada en revista “Cell Stem Cell”.
El estudio lo encabezó el genovés Valter Longo, profesor de gerontología y ciencias biológicas en la Universidad del Sur de California, quien señaló que "cuando uno ayuna, el sistema trata de ahorrar energía".
"Y una de las cosas que puede hacer para ahorrar energía es reciclar muchas de las células de inmunidad que no necesita, especialmente las que puedan estar dañadas", agregó.
La quimioterapia que se administra a los pacientes con cáncer puede salvarles la vida, pero también causa muchos efectos secundarios, incluida la merma de las células del sistema de inmunidad.
Se calcula que más del 20% de las muertes relacionadas con el cáncer se aceleran, o incluso son causadas, por los efectos tóxicos de la quimioterapia, más que por el cáncer mismo. Por ello los médicos limitan las dosis y frecuencia de la terapia química a los niveles que son tolerados por los pacientes, pero eso reduce la eficacia general de los tratamientos contra el cáncer.
Pero aún en ausencia de la quimioterapia el envejecimiento normal empobrece al sistema de inmunidad y lleva a deficiencias con un riesgo más alto de desarrollo de leucemia y una variedad de enfermedades.
Actualmente no hay intervenciones médicas que mengüen los efectos secundarios que la quimioterapia tiene sobre el sistema de inmunidad o que prevengan la disfunción celular en el sistema de inmunidad que acompaña al envejecimiento.
Los estudios anteriores de Longo y sus colegas habían mostrado que una restricción temporal de la nutrición podía incrementar la resistencia de las células madre a ciertos factores de estrés. El trabajo más reciente buscó comprobar si el ayuno podía proteger a las células del sistema de inmunidad.
Tanto en los ratones de laboratorio como en la primera fase de la prueba clínica con humanos, los períodos de ayuno bajaron significativamente la cuenta de células blancas en la sangre.
Los ayunos empleados consistieron en períodos de dos a cuatro días sin comidas, en el curso de seis meses.
"Lo que empezamos a notar, tanto en los animales como en los humanos, fue que bajaba la cuenta de células blancas durante el ayuno prolongado", apuntó Longo. "Luego, cuando se vuelve a comer, las células de la sangre se recuperan".
El ayuno prolongado fuerza al organismo a consumir sus reservas de glucosa, grasa y cetonas, pero también descompone una porción significativa de células blancas en la sangre, un proceso que Longo compara con quitarle a un avión el exceso de carga.
El ayuno prolongado además reduce la enzima PKA que, según Longo, es el gen clave que debe apagarse para que las células madre pasen a la modalidad regenerativa".

viernes, 16 de octubre de 2015

Propiedades de la carqueja


El nombre científico de la carqueja es Baccharis articulata, Baccharis trimedia y Baccharis crispa, que son todas especies con propiedades similares. La carqueja presenta la forma de un arbusto propio de zonas templadas y húmedas, que abunda en América del Sur, con especies femeninas y masculinas (dioico). Jaguarete ka’a (“yerba del Jaguar”) es el nombre con que se conoce a este arbusto en Paraguay.
Su sabor es amargo por contener lactonas sesquiperténicas, las que a su vez le otorgan sus propiedades curativas, por lo que suele mezclarse con otras hierbas pues a muchas personas les resulta desagradable su sabor puro. Sin embargo, conviene hacer el esfuerzo de tomarla pues son muy grandes los beneficios para la salud en varios aspectos aunque sus más conocidos logros, están en sus propiedades adelgazantes, las que además favorecen a que no se acumule grasa en el organismo y por ende disminuye el colesterol malo.
La carqueja tomada en forma de infusión (20 gramos por litro de agua) depura el organismo al actuar gracias a sus flavonoides como diurético, beneficiando a los riñones, y protege al hígado. Es ideal para quienes sufren de cirrosis y cólicos biliares.
Su ingesta tiene acción afrodisíaca y favorece el tratamiento del reuma, de la diabetes, de la acidez, de la gota, de las metrorragias y de las úlceras; es antiséptico y antiespasmódico.
Su acción depurativa también se refleja en la piel, por lo cual es muy recomendada para quienes padecen de acné y otras dermatitis; y para eliminar parásitos del intestino. Puede usarse externamente para la curación de zonas lastimadas.

Tomates al horno con queso:


Ingredientes:
2 tomates medianos o más bien pequeños por persona (no demasiado maduros)
6 cuchradas de queso rallado por tomate
Unas hojitas de orégano fresco o albahaca,
orégano molido, una pizca de sal y otra de pimienta por cada mitad tomate
Aceitunas (opcional)
Aceite vegetal

Preparación:
Precalentar el horno. Lavar bien los tomates y cortarlos por la mitad. Colocarlos sobre una asadera aceitada. Espolvorear por encima el queso rallado, el orégano molido, la sal, la pimienta y las hojitas de orégano o albahaca. Terminar de decorar con las aceitunas si decidieron incluirlas en la preparación. Untar con un poquito de aceite por arriba, y gratinar en el horno.
(de Vegetomania.com)

lunes, 12 de octubre de 2015

Alimentos protectores contra el cáncer


El cáncer es una enfermedad presente a nivel mundial y nuestro país no es la excepción, donde el cáncer de mama es la segunda causa de muerte por cáncer. El cáncer se relaciona con la interacción de factores genéticos y hormonales y de hábitos de vida no saludables como el consumo de tabaco o el alcohol, tensiones emocionales y una alimentación inadecuada. “Hoy en día existen evidencias científicas de alimentos con propiedades anticancerígenas, denominados alimentos funcionales, con compuestos bioactivos que tienen una actividad biológica dentro del organismo y que se traduce en beneficios para la salud”, explica Alberto Fernández Gutiérrez, director del Centro de Investigación y Desarrollo del Alimento Funcional (CIDAF) del Parque Tecnológico de Ciencias de la Salud de Granada. Ejemplos de estos compuestos activos, algunos de ellos con gran capacidad antioxidante que evitan el crecimiento y la proliferación de células tumorales, son los indoles presentes en las coles; la vitamina A de la zanahoria o el melocotón; los flavonoides de los cítricos, piña o pera; el licopeno del tomate, sandía o fresas; la presencia de antocianinas y fenoles en uvas, ciruelas o berenjenas y el alto contenido en luteolina de lechuga, melón o espinacas. También el vino tinto, las setas, el té verde o los ajos tienen propiedades beneficiosas para la salud a través de sustancias presentes en su composición como el resveratrol en el caso del vino o la lentionina en el caso de las setas shiitake mostrando, este último, un gran potencial para prevenir la formación de trombos y el cáncer de hígado. Francisco Antonio Macías, catedrático de Química Orgánica de la Universidad de Cádiz, recomienda ingerir alimentos funcionales en la dieta diaria y recalca que la clave se encuentra en sus compuestos químicos, fundamentalmente, en los ácidos grasos beneficiosos; en los fenólicos (especialmente las isoflavonas); y los terpenoides cuyo derivado, el taxoter, funciona ya como principio activo en medicamentos anticancerígenos. -

viernes, 9 de octubre de 2015

miércoles, 7 de octubre de 2015

Paté de Zanahorias y Aceitunas


Ingredientes del paté de zanahorias y aceitunas (6 personas):
600 g. de zanahoria.
75 g. de aceitunas.
30 g. de sésamo tostadito.
3 cebollas de tamaño medio.
1 cucharadita y media de crema de guindilla marroquí (harissa).
1 cucharada y media de jugo de limón.
3 cucharaditas de sal gorda.

Elaboración del paté de zanahorias y aceitunas:
La preparación del paté de zanahorias y aceitunas es muy sencilla, incluso si no se maneja habitualmente en la cocina.
Pelamos la zanahoria y la cortamos en cuadraditos de buen tamaño y lo pasamos a un caldero con agua suficiente para que cubra un poco por encima de los taquitos. Le añadimos también un poco de sal.
Lo ponemos a fuego medio de 12 a 14 minutos o hasta que al pincharlo con la punta de un cuchillo éste penetre con facilidad en la zanahoria.
Mientras, vamos deshuesando las aceitunas, lavamos las cebollas y picamos todo finamente.
Ponemos a escurrir la zanahoria y cuando se haya enfriado un poco la pasamos por la batidora junto con el resto de ingredientes que hemos preparado del paté (aceitunas y cebolla). Le añadimos también la guindilla marroquí y el jugo de limón. Hacemos un  puré con todo y ponemos sal al gusto.
Tostamos la sal gorda, la trituramos con el sésamo y lo espolvoreamos todo sobre el paté de zanahorias y aceitunas.
(de EN
nbuenasmanos.com)