viernes, 26 de mayo de 2017

El ghee (aceite de manteca de origen animal libre de colesterol)


El ghee es obtenido a partir de la manteca. Incrementa la longevidad, la memoria y la inteligencia. Da fuerza al organismo y demora el proceso de envejecimiento de los tejidos del cuerpo. Incrementa la fertilidad del semen y el óvulo, mejora la voz y la garganta y es especialmente bueno para los niños y ancianos, ayuda a formar los siete elementos estructurales del cuerpo y elimina el exceso de bilis. También puede utilizarse externamente en abscesos, cortes y quemaduras. Es bueno también para las úlceras, las enfermedades del pecho y la intoxicación. Tiene la propiedad especial de encender el fuego de la digestión y contiene el valor nutritivo de la leche de la cual fue hecho. El ghee se puede utilizar como vehículo para las hierbas medicinales, hirviendo éstas en él en vez de en agua. Este ghee se conserva pudiéndose tomar una cucharada diariamente. El ghee que tiene diez o más años, se convierte en una poderosa medicina para combatir obesidad, epilepsia, vértigo, dolor de cabeza y diferentes problemas de los ojos y de los oídos. Además de sus propiedades nutritivas y medicinales, el ghee le da un gusto exquisito a las comidas pudiéndose utilizar como aceite para saltar, asar, dorar y freír en lugar de los aceites vegetales que se venden hoy en día. Hacer ghee no es difícil ni complicado, aunque sí lleva su tiempo. La obtención del dulce sabor, parecido a las nueces, de la manteca derretida requiere una cocción larga y lenta que evapore totalmente el agua y permita a los elementos sólidos de la leche separarse y flotar en la superficie, dejando un ghee claro, de color ámbar.
Para hacer 800 gs de ghee se necesita 1 quilo de manteca. Caliente la manteca a fuego moderado, hasta que empiece a hervir. Cuando la superficie de la manteca está cubierta de una espuma blanquecina, reduzca el fuego al mínimo y deje la cacerola destapada. Retire de vez en cuando las materias sólidas que surjan a la superficie, cuide de que no se queme el ghee. Si el mínimo sigue siendo demasiado fuego debería subir la cacerola con la ayuda de algún tostador, plancha, etc. Si se calienta a fuego muy vivo o demasiado tiempo, se oscurecerá y desprenderá un olor penetrante. Una vez que está listo deberá tener un color ambarino y ser lo suficientemente transparente para ver el fondo de la cacerola. Viértalo con cuidado en un bollón y déjelo enfriar a temperatura ambiente, destapado. Las materias sólidas extraídas de la superficie, y las que resten en el fondo de la cacerola pueden ser utilizadas para preparar verduras cocidas, sopas y legumbres. El tiempo de cocción de 1 quilo de manteca para lograr estos 800 c.c. de aceite lleva aproximadamente media hora.

Algunos consejos útiles para la utilización del ghee:

Todos los ingredientes que van a freírse en ghee deben preparase,moldearse, cortarse o extenderse cerca de donde se vayan a cocinar y a temperatura ambiente. Cuando se use el ghee para freír especias, ponga primeramente, todas las especias cerca para evitar que el ghee se queme mientras está buscándolas. Si el ghee hace espuma al calentarse, está mal hecho. Bájele temperatura y déjelo que hierva hasta que el sólido desaparezca. El ghee tendrá la temperatura adecuada cuando al introducir el trocito de alimento, éste suba rápidamente a la superficie. Por cada sartenada, baje el fuego mientras prepara la siguiente donde levantará el fuego de nuevo. Le sugerimos no verter demasiada cantidad de alimento en cada sartenada porque demorará en cocerse bien y no se dorará. Estos consejos se extienden para el uso de aceites vegetales. Para freír abundante, puede emplear el mismo ghee durante varias recetas pues no sufre alteraciones como el aceite vegetal y solo lo descartará si se ha quemado como pasa con los aceites convencionales.

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